3/21/2020

La Pandemia

Nos aprestamos a vivir una de las demostraciones más contundentes de la teoría de Gustave Le Bon. En medio de una pandemia mundial salen a relucir las característica más relevantes de esa gran masa a la que se refiere Le Bon, con más poder que nunca desde que se le otorgó voz y voto a través de las redes sociales. El miedo será su fuente de energía y lo esparcirá con todo el poder y convicción de su propia estupidez; estoy seguro que veremos hablar de catástrofes, apocalipsis, conspiraciones gubernamentales, aparecerán vídeos y audios (es la época de la multimedia y mediaciones virtuales) , algunos asegurarán haber visto hasta zombies (tal vez están viendo algún espejo) porque se  mantendrán viendo noticias porque les seduce la carroña y el morbo; veremos "evidencias irrefutables" de que saben más de medicina, ciencias políticas y gobierno que nadie y se postularán como estandartes morales para juzgar desde sus altares imaginarios a todo aquel que se les ocurra señalar. Esta fuerza tiránica que se atribuye el estar más allá de toda discusión, podría estarse educando en el encierro, gestando ideas que aporten al progreso de su prole y/o la humanidad, pero no lo hará; no es después de todo su deber, tienen claro que es deber del Estado. Internet les concedió el privilegio de agruparse por niveles de inteligencia y pues hay un gran bulto arrumado virtualmente y hacen mucho ruido, como es de esperarse, después de todo la voz del pueblo es la voz de Dios.