12/31/2022

2022 >>> 2023


 Quiero despedir este 2022 con un sencillo pero sentido mensaje para aquel que quisiera tomarse unos minutos para leerlo. Antes que nada, espero que este haya sido un año de mucho aprendizaje y crecimiento; es decir que los retos los hayan convertido en lecciones: Fin último de esta vida.

Ojalá podamos convivir en paz en este 2023 y eso no significa que todos debemos pensar y sentir igual, desde siempre ha sido así; nos convencieron de que eso estaba mal y lo hemos naturalizado. No somos iguales, nunca lo hemos sido y eso está bien, sólo debemos aceptarlo. La única igualdad aceptable y deseable es la igualdad ante las leyes, las reglas de convivencia; de resto, no permitamos que nos convenzan de que hay que odiar o rechazar al que  piensa distinto a nosotros, porque tienen y siempre han tenido ese derecho ¿O acaso debemos insultar al ateo si somos creyentes? ¿O al creyente si somos ateos? Si nuestras creencias espirituales, que se supone que son las que le dan sentido a nuestra vida no nos dividieron antes ¿por qué ahora sí las políticas, filosóficas, nos van a dividir? Necesitamos unirnos (no pensar igual), unirnos como colombianos, como familia, como sociedad, enfocándonos en lo que sí es común a todos; nuestra humanidad, esa condición tan frágil y vulnerable que cualquier día, a cualquier hora y en el momento menos esperado, puede ser borrado de un plumazo de la faz de la tierra.

Te deseo un 2023 lleno de energía positiva, esto es: Mucha prosperidad, sabiduría, silencios, lectura, buena compañía, alegría, buena salud, música, tolerancia (especialmente contigo mism@), que es la piedra angular de cualquier otra tolerancia. Confía en ti mismo, en la vida o en el Ser Máximo en el que creas, pero sobre todo espero que al final del 2023, te mires en el espejo y puedas decir en voz alta: Caramba, esta es decididamente una mejor versión de mí mismo.

Feliz año nuevo.

10/14/2022

MOVER LA LÍNEA DE LA ÉTICA

 


Estas iniciativas, me parecen súper interesantes porque reflejan más bien una posición o un subterfugio audaz e ingenioso para establecer y normalizar conductas en una sociedad; claramente dependiendo del norte de cada liderazgo, me imagino que lo harán con las mejores intenciones o eso prefiero creer.

Pero analicemos un poco el contenido de estas propuestas. El director de la Dian propone legalizar y gravar este producto de exportación colombiano muy exitoso; el objetivo subyacente consiste en que así se recaudaría más dinero (aparte de las reformas ya en marcha), para así contar con recursos ilimitados para invertir en educación, salud y todo lo bueno que hay en esa patria prometida. Esto va en la línea del argumento que dio por ejemplo nuestro honorable presidente en una alocución conmovedora en la ONU y es que la cocaína no es tan peligrosa porque muere menos gente por sobredosis que por inhalación de gases… o algo así entendí y que esto alejaría a la policía de los agricultores de coca (Esta fijación con la policía merece un capítulo especial, otro día), despenalizando la producción de hojas de coca y permitiendo a los colombianos consumir cocaína de forma segura.

Sin embargo y aquí viene mi primera objeción y es: Yo creo que se han banalizado los efectos de la cocaína cuantificando las muertes por sobredosis, desconociendo los efectos de esta droga en la conducta de las personas. ¿Cuántos crímenes, accidentes fatales, destrucción de familias enteras, relaciones, fortunas, negocios, ha producido el consumo sin sobredosis) de la cocaína en los individuos? No estoy hablando de las luchas entre carteles relacionadas con la producción y distribución de la coca, estoy hablando de los efectos nocivos en la salud psicológica y emocional de las personas comunes y corrientes que la consumen y su entorno. Quisiera preguntarte ¿Conoces de cerca la problemática de una familia en la que un miembro es adicto a la cocaína? ¿Podríamos atenuar los efectos sociales, psicológicos, económicos, familiares de esta adicción si lo comparamos con la cantidad de dinero que podría el estado recaudar para… Lo que dicen que usarán ese dinero? ¿Se ha hecho un estudio estadístico de la relación directa entre el consumo de cocaína y los niveles de violencia y seguridad pública, la violencia doméstica, el maltrato infantil, el homicidio, los atracos...? ¿Justificaría todo esto siempre y cuando los productores, distribuidores y consumidores paguen un impuesto justo? En ese orden de ideas, se me ocurre que se pueden gravar otros productos y servicios que podrían dejarle buenos réditos a la DIAN; estudiemos legalizar entonces también el uso de armas de fuego, legalicemos la trata de mujeres, la pedofilia, entre otros. ¿Cuál sería el rasero que usaremos para decidir cuáles productos y servicios deberíamos legalizar y cuáles no? ¿Cuál es la medida? ¿Hacia dónde vamos a mover la línea de la ética ya que esto ha sido social y públicamente aceptado por las ciudadanías libres?

No más preguntas su señoría, por ahora.


10/12/2022

EL OVERTHINKER

 

Bzzzz… mañana tengo que hacer ese pago… bzzzz ¿Y ahora que me irá a decir? Bzzz… ayer se me olvidó enviar ese correo… Bzzzzz… ¿Qué será lo que quiere de mí ahora…? Bzzzzz… ¿Cómo me levanto ahora ese billete? Bzzzz… Necesito pagar la cuota del carro.. Bzzz… Me parece el colmo que… Bzzzz…

Esta es la cabeza de un “overthinker”. Una persona cuyo sistema operativo mental no para de pensar, de enhebrar ideas inconexas, frases desarticuladas entre sí; Si pudieras escuchar el ruido mental de un overthinker, no podrías soportarlo por mucho tiempo. Y hablando de tiempo, su plano temporal es siempre el pasado o el futuro, nunca está presente en su cuerpo, porque todos estos pensamientos no se generan durante la acción que esté realizando sino mientras hace otras cosas, mientras conduce, camina, come, incluso con frecuencia, mientras habla con otras personas. El overthinker cree que todo ese ruido mental es lo normal, esas voces que escucha en su cabeza creyendo que son las suyas, lo habitan desde que tiene uso de razón, por lo tanto “debe” ser normal ¿Verdad? ¿Qué tiene de malo? Después de todo es lo que nos distingue de los animales, se autosugestiona. Un overthinker, a pesar de ese zumbido enloquecedor que sin saberlo lo atormenta, cree que si no fuera por eso, no habría alcanzado los logros que ha alcanzado en la vida, ignora simplemente que ese mismo zumbido también le ha traído sus peores pesadillas. Carece de la capacidad de disfrutar del regalo precioso del momento presente, salvo esos breves… Brevísimos momentos en que logra enfocarse en el primero de 100 bocados de comida; no puede, no sabe sincronizarse con la vida. Desconoce que está desafinado y va así, como esa bestia de la selva que camina desapacible entre una nube de moscas que lo atormentan día y noche y no sabe cómo espantarlas. El overthinker vive siempre fuera de sí mismo, vive en los demás, por lo demás y no es consciente de lo que sucede dentro de su cuerpo, en su interior; va por ahí dándose tropezones con todo, con todos, desafinado; pensando y pensando, ofuscado, confundido, inconforme, perdido. Cuando conversa no está realmente escuchando al otro, sólo espera que se calle de una buena vez para poder exteriorizar sus valiosos pensamientos. No sabe o no puede disfrutar de las cosas sencillas de la vida, no recuerdan el último sabor que acogió su boca, ni el último olor que acarició su olfato, ve sin ver, oye sin escuchar…

Cuando no está ensimismado pensando y pensando, el overthinker se imbuye en su celular, ve videos que pasa con su dedo, uno tras otro con prisa, no hay tiempo que perder, el tiempo es oro, la vida pasa ante sus ojos irracional e indescifrable; cuando logra dormirse por puro cansancio físico porque hasta antes que se le cierren los ojos está pensando y pensando, la vida inmerecidamente le da unas horas de descanso mental, si es que no se despierta a seguir pensando. Su cabeza es un hervidero de preocupaciones, de situaciones que no han sucedido y que probablemente nunca sucederán, pero no puede, no sabe detenerse. El overthinker se considera a sí mismo inteligente por eso, porque es un pensador nato; no tiene tiempo y esto es muy importante: el overthinker nunca tiene tiempo, todo es urgente; de cualquier modo la vida se le escapa de sus manos así como vino, confusa, contradictoria, indescifrable. Y cuando felizmente mueren, se quedan pensando confundidos… ¿A qué fue que yo vine a este mundo?

 


10/02/2022

CAPITALISMO vs GASTO

 

Me decidí hablar sobre este tema a pesar de que he dicho que no me interesa educar a nadie aparte de a mí mismo, pero no me quise resistir mucho esta vez; sólo porque la persona en cuestión, al intercambiar conceptos en lo que empezó a ser una discusión interesante sobre economía política (un tema del que me gusta leer profusamente), terminó siendo lo de siempre cuando no se tienen más argumentos teóricos y en este caso en particular, lo que para él era un insulto: ¡Capitalista! Me dijo con la respiración entrecortada por la furia y una mirada vidriosa por el vino, en lo que para él entendía, es una posición política.

Como siempre peras y manzanas, primero porque la mayoría confunde un sistema económico con un sistema social porque Wikipedia lo formula así y Wikipedia, los ideólogos pagados no nos van a mentir ¿Verdad? Pero yo apelo a tu sentido de la lógica; Ojalá algún día puedas entender que el Capitalismo es un sistema económico, que el socialismo es esto: Un sistema social, una doctrina política que pretende administrar la economía (de una manera desastrosa como la historia ha demostrado). Lo opuesto al socialismo realmente es la democracia; Tanto las sociedades democráticas como el socialismo, son capitalistas. Todos los países que han asumido el socialismo como sistema político han sido capitalistas, la diferencia está en la forma como administran el dinero. Es falso que se debe estimular el consumo para que la economía funcione y ese es un error demostrado por Friedrich Hayek acerca de la obra de Marx y Engels. Paréntesis, yo estoy casi seguro de que la mayoría de los que se perciben como Progresistas, que es la versión light del socialismo moderno, cuanto mucho (y francamente lo dudo) se habrán leído un par de obras de estos, y los que se perciben como capitalistas, ni por curiosidad sabrán qué es la Escuela Austríaca. Para ellos sólo existen el blanco y el negro, la derecha y la izquierda.

En fin, el capitalismo no se basa en la estimulación del consumo como les enseñan a los economistas en nuestras universidades, se basa en la acumulación del capital, pero ¿Qué es “Capital” ?: Inversión ¿La inversión de dónde viene? Del Ahorro ¿Y el ahorro de dónde viene? Precisamente de reducir el consumo. Una sociedad consumista es una sociedad que consume el 100% de su renta, ergo: una sociedad pobre; por lo tanto, lo opuesto al capitalismo en realidad es el consumismo. Si un país no puede ahorrar, no puede acumular capital, y si no acumula capital, no puede aumentar su capacidad de inversión y por tanto su productividad. La hipótesis Keynesiana del gasto público que es el referente teórico de todos los gobernantes progresistas del mundo (ojalá tuvieran tiempo de leer su obra), y que dicho sea de paso es el referente teórico de las facultades de economía de las universidades públicas, exacerba la importancia del gasto público. Gastar en programas que al oído del ciudadano común tienen sentido: Gastar para redistribuir la riqueza, para erradicar el hambre, para crear nuevos empleos públicos, pero eventualmente, un gasto que de todos modos tendremos que pagar todos, créeme, no sólo los más ricos. Por eso no te has enterado aún que el socialismo como sistema social y de administración de recursos, comenzó hace rato en Colombia con su exponente más poderoso: J.M.S.

El gasto es lo opuesto al ahorro, por lo tanto: de la inversión, la riqueza y el progreso de una nación. Porque la riqueza mi amigo, no es exceso de dinero como crees tú, es la deisponibilidad del recurso inmaterial más valioso del humano: El tiempo, que es a la postre lo que necesitas comprar con dinero. Conozco gente “rica” en dinero que no tiene tiempo para disfrutar de lo que quiera que sea más valioso para ellos; gente pobre después de todo. Porque la verdadera riqueza es disponer del tiempo suficiente para desarrollar tu proyecto de vida, la razón por la que viniste a este planeta.

Así que mi amigo (el de la discusión, sé que me estás leyendo), no me ofendiste, porque sí me gusta ahorrar (según mis posibilidades), sí me gusta invertir (según mis posibilidades), sí llevo una vida austera, tranquila sin grandes gastos, cubriendo mis necesidades básicas y sobre todo: enfocada en mi proyecto de vida; Así que sí, sin duda soy un capitalista.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


9/24/2022

EDUCACIÓN PÚBLICA, GRATUITA Y DE CALIDAD

 


Al parecer muchas personas ignoran lo que los indicadores confirman, desde antes de la plandemia: La caída de la demanda universitaria a nivel mundial, no sólo en Colombia; especialmente en el esquema ortodoxo de la formación profesional presencial. Y eso no significa que el interés de las personas por formarse profesionalmente haya caído, no señores; lo que sucede es que vienen emergiendo con fuerza otras alternativas de formación virtual en todas las áreas, con costos muy escalonados, menos burocráticas y ciertamente más eficientes, que están respondiendo a unas expectativas sociales que La Universidad no ha sabido interpretar ni responder satisfactoriamente.

Francois-Guy Trebulle, decano de la Sorbona, expresó recientemente: “Si las universidades no evolucionamos, vamos a desaparecer”. Mismo diagnóstico hace David Roberts de la universidad de Silicon Valley, o más apremiante aún la declaración de Dan Levy de Harvard: “Muchas universidades van a cerrar porque no hacen falta”. Si alguien leyó el libro de Andrés Oppenheimer (Sálvese quien pueda), narra cómo el presidente del MIT habla del fin de algunas carreras tradicionales; por razones obvias, no existe una relación directa entre lo que nuestra sociedad necesita (demanda) y lo que las universidades catatónicas de siempre ofrecen. Hoy en día, si quieres trabajar para multinacionales como Microsoft, Apple, IBM, Google, no te van a pedir el cartón de ingeniero de sistemas. Cada vez más observamos cursos certificados online que te preparan para una nueva demanda laboral, que al parecer a las universidades tradicionales no les han comentado aún.

Claro, si eres de estas corrientes teóricas que creen que la solución es que las nuevas empresas que ofrecen formación técnica y profesional pertinente decrezcan, para que las universidades de formación tradicional sigan moviéndose con vida como el gusano prehistórico que son, pues déjame decirte que te entiendo, pero también estás destinado a extinguirte. Por eso se escucha con tanta frecuencia aún por parte de estos gusanos políticos populistas de derecha e izquierda de nuestro país, que se necesitan reformas billonarias que nos permitan endeudarnos por generaciones, para seguir alimentando dinosaurios que devoran el erario público porque la clave está en la “educación estatal, gratuita y de calidad”, así le dicen a esta porquería de sistema educativo que tenemos. O sea, mucho, mucho más dinero en infraestructuras anquilosadas por la corrupción y la idiotez, en plena 4ta ola revolucionaria de la era de la información y la tecnología. Ni se han enterado, porque creo que no es ni maldad, simple pereza intelectual, ignorancia y/o artrosis mental.

Piensa muy bien antes de meter a tu hijo/a en este sistema de deformación profesional que llamamos universidades y sobre todo piensa si ese título profesional que los acreditará profesionalmente después, ¿5? ¿8? ¿12 años de estudios universitarios? Los harán parte de la demanda mundial de las nuevas profesiones del mundo Postpandemia.

Para que después no tengas que echarle la culpa a Petro, Uribe o Duque.


9/20/2022

THE GREAT RESET

 


Creo que es hora de abordar así sea sucintamente el temita este de la agenda 2030. Y digo sucintamente porque si llegara a profundizar públicamente sobre ello, corro ciertos riesgos innecesarios que no vale la pena mencionar ahora.

Sólo quiero decirles, que dentro de esa agenda que obviamente es presentada ante la masa global como algo positivo, necesario y beneficioso para la humanidad, está enmarcado literalmente, un gran cambio; económico, ambiental, social… Dada nuestra tendencia mental de fragmentar la realidad, solemos creer que los eventos experimentados a través del tiempo en estas áreas, están desconectados unos de otros, de modo que no relacionamos; por un lado, la industria del entretenimiento Nos Entretiene, la industria alimentaria Nos Enferma, la Banca mundial Nos Endeuda, la clase política Nos confunde y la industria de la salud Nos Mata.

No puedo profundizar mucho en esto señores(as), sólo los invito a usar de vez en cuando su sentido de la lógica, despojarse de sus creencias fanáticas y preguntarse con su mano derecha en el corazón: ¿Realmente crees que esta plataforma globalizada de poder, con recursos ilimitados para modelar la realidad y adherir a esta nuestra conducta, ha estado invirtiendo tanto tiempo y dinero para nuestro beneficio? ¿De verdad crees que la famosa pandemia fue un evento fortuito e inconexo con los movimientos políticos y sociales que estamos observando en el mundo (y muy particularmente en LATAM)? Te invito a que visualices al Foro Económico Mundial, a la más moderna élite de billonarios, la banca mundial, la ONU, la OEA, la OMS y todas estas entidades articuladas y aceitadas, devanándose los sesos e invirtiendo tantos recursos, porque quieren lo mejor para nosotros. Pregúntate si estas élites son capaces o tienen el poder de colocar los gobernantes que ellos quieran en cada país, como parte de todo este plan mundial de reseteo; hazte preguntas simples y lógicas, sal de la comodidad de las ideologías políticas y el fanatismo estúpido, y pregúntate si genuinamente es sólo una coincidencia que en este 2022, un año significativo para la numerología, esté cambiando el mapa geopolítico mundial, el ascenso de líderes progresistas, el advenimiento de su alteza el príncipe de Gales (te apuesto que nadie ha dimensionado el impacto mundial que este evento traerá), la renombrada guerra de Ucrania, la guerra contra el dólar y el nuevo capitalismo, el famoso “cambio climático” ¿De veras crees que es “El despertar de la humanidad”? Cuando empecemos a sentir el efecto de las medidas económicas, sociales, de salud, etc. Pregúntate de nuevo si después de todo, todo esto es por nuestro bien. Sobre todo, pregúntate si realmente crees que este sea un fenómeno colombiano aislado. Mis amigos, yo sé que es más fácil engañarnos que convencernos de que hemos sido engañados. Pero les prometo que tarde o temprano, de una forma u otra, la evidencia aplastante de este Great Reset Mundial, te hará despertar de tu borrachera intelectual y la resaca será terrible.

p.d. les dejo un ejercicio aritmético casual (un jueguito inocente). Suma el año en que naciste a tu edad.

A mí no me prestes atención, préstale atención a tu intuición. https://www.weforum.org/great-reset/

Despierta, la Matrix, te tiene.

9/14/2022

BLANCO O NEGRO

 

Existen varias razones por las que las redes sociales son para mí un laboratorio social, un campo experimental del comportamiento humano; aprietas un botón por aquí, una clavija por allá y saltan resortes emocionales que revelan sutilmente las estructuras psicológicas de muchas personas. Aparte de que el escenario macondiano de un país como el nuestro le aporta el combustible perfecto para estudios de esta naturaleza.

Y aprovecharé el término “combustible” para encend… Quiero decir, para iniciar el soliloquio de hoy. Muchos (incluyéndome), se han divertido por cuenta de la fauna política colombiana, dada su inclinación a alimentar esta fábrica de memes que conforma la crítica social y política debido al nivel intelectual de sus ciudadanos; encontré divertidos cuantos memes surgían de las desinteligencias del anterior presidente hasta las no menos hilarantes salidas en falso de varios personajillos de la farándula política actual. Pero poniendo los chistes a un lado, he podido percibir que la mayor parte del origen de esta posición de superioridad moral en la que nosotros, seamos del partido o tendencia política que sea, ostentamos, se sujeta a un fenómeno llamado Error de atribución fundamental, también conocido como el sesgo de correspondencia o de sobre-atribución, es la tendencia que tenemos de sobre-atribuir las características personales e ignorar factores contextuales cuando juzgamos el comportamiento de los demás. Debido al error fundamental de atribución, solemos creer que los que actúan mal son malas personas. No estamos dispuestos a tomar en cuenta los factores contextuales o estructurales cuando juzgamos las acciones y situaciones de los demás. Pero esto no es todo, aquí entra otro concepto que encontré interesante en mis estudios científicos (XD), se llama Grupo de pertenencia/Grupo de no-pertenencia.  Un grupo de pertenencia es un grupo compuesto de personas que se identifican consigo mismos a base de una serie de características o factores incluyendo el género, la raza/etnia, la religión, o la geografía, entre otras cosas. Por ahí leí un estudio en el que cuando los aficionados del futbol veían que otros aficionados (del mismo equipo) sufrían algún daño físico, sentían empatía por ellos. Pero cuando ese trataba del equipo rival, sentían placer. Y es que solemos hacer distinciones importantes basadas en grupo de pertenencia o no-pertenencia cuando se trata de cuestiones morales. Cuando alguien dentro de nuestro grupo de pertenencia se comporta mal, la reacción natural es ignorar el comportamiento o minimizarlo, pero cuando se trata de alguien que no pertenece a nuestro grupo, solemos juzgar su comportamiento de manera mucho más punitiva. De hecho, cuando las distinciones entre la pertenencia o no al grupo substituyen la reflexión consciente y racional, somos capaces de hacernos daño el uno al otro y comportarnos de manera poco ética.

Así las cosas, un grupo de pertenencia que conozco de cerca, se dio gusto atacando y burlándose de otro grupo de pertenencia por cuatro años sin un solo día de descanso, no me dejen mentir; tal vez por ingenuidad o desconocimiento de las leyes termodinámicas de la vida que siempre busca equilibrarse, ni se imaginaron que esta pondría todos los elementos perfectos para que ahora su grupo de pertenencia fuese el blanco de burlas y memes. Ambos grupos creen honestamente que su cognición moral es la adecuada,   obviamente no pueden sustraerse del fenómeno del sesgo de confirmación de modo que eso se extenderá hasta que evolucionen y comprendan que este planeta no es un paraíso perdido y que la especie humana no es la creación perfecta de Dios; aunque puede que sí, pero no en este planeta, evidentemente. Mientras idealicemos personas, ideologías, partidos, habrá división y guerras. Y memes divertidos claro está, porque qué tiene de malo divertirse en esta prisión perpetua.


9/11/2022

IMAGINA SI...

 

Entendiendo como lo entiendo ahora, la diferencia entre gastar e invertir, prefiero invertir que gastar, hoy día gasto muy poco y no soy fan de comprar mucha ropa, zapatos o teléfonos muy inteligentes, sólo lo estrictamente necesario y a veces demasiado estrictamente; en cambio me gusta invertir en libros, experiencias edificantes o negocios que me permitan libertad de tiempo, el cual creo firmemente, es el activo más valioso que podemos aspirar a tener. Y me refiero a tiempo para ser y hacer lo que verdaderamente vinimos a hacer a esta vida (tiempo de calidad). Es la definición más adecuada para mí de lo que significa ser rico, que no es lo mismo que tener mucho dinero. Conozco gente que tiene mucho dinero y poco tiempo; mal negocio para mí porque si el dinero sólo te permite comprar cosas y no tiempo, no eres rico. Además entendí que si lo que quieres es dinero para “comprar” tiempo, tenía que invertir ambos.

Obviamente puedes estar en desacuerdo y me parece perfecto, no tenemos que estar de acuerdo, a pesar de este nuevo condicionamiento social en el que nos han imbuido, donde a los que piensen diferente a ti, se les debe insultar y eventualmente acallar, recuérdalo: No tenemos que estar de acuerdo y aunque te parezca difícil de creer no tienes que denunciarme ante la suprema corte del correctismo político de facefuck. Era un paréntesis dentro de este monólogo dominguero, nunca tengo ni idea de hacia dónde se dirige la idea principal cuando me siento a escribir estas pendejadas que se me ocurren que para mi sorpresa, tienen uno que otro lector por ahí.

Dicho esto, debo confesar que cometí muchos errores financieros durante toda mi vida; claro, a mí nadie me enseñó en el colegio ni en mi entorno a desarrollar una vida financiera sana, aprendí fue a trabajar para sobrevivir, endeudarme para adquirir cosas, incluso un hábito que parecería saludable: Ahorrar para comprar cosas. Nadie me enseñó a invertir para comprar mi libertad del sistema financiero. Pero, ah eso sí, me enseñaron con mucho esfuerzo a distinguir entre un retículo endoplasmático y una mitocondria; entre un diptongo y un triptongo. Pero incluso cuando pensé que estaba bien encaminado, me enseñaron a invertir para ganar dinero y comprar cosas, darme vacaciones, breves momentos de ilusión que me hacían sentir bien; pero nada de esto iba dirigido a liberarme de tiempo para hacer lo que vine a hacer y ser en esta vida, lo que dicho de otro modo, es lo que le da sentido a la vida de uno. Sin embargo siempre, tarde o temprano llegará la pregunta más importante a la que nos tenemos que enfrentar: ¿Cuál es el sentido de mi vida? De aquí se empezarían a derivar otros no menos inquietantes cuestionamientos tales como: Lo que estoy haciendo, a lo que me dedico ¿Es el sentido de mi vida? ¿A esto vine realmente? Muchos de ustedes, seguramente se responderán, Sí. A esto vine y por eso uno los ve felices y plenos, personas tolerantes, satisfechas consigo mismas y se los digo con toda sinceridad, los felicito. Ustedes tienen el deber moral de compartir sus experiencias y sabiduría con los demás porque a mí y a un par por ahí como yo, despistados y mal educados, pasamos mucho tiempo en esta vida dando tumbos, arrastrándonos en una lucha por la supervivencia, batallando por el pan de cada día con la esperanza de que las sobras del día nos alcancen para descansar. Bien aventurados quienes aprendieron a tiempo lo que hasta apenas un par de años vine finalmente a descubrir como experiencia. Cuando la mayor cantidad de horas al día estás haciendo algo que te llena de plenitud y alegría es cuando eres verdaderamente rico.

En mi experiencia personal, esta alegría me la daba estar con mis estudiantes, compartir vida con ellos, pero debo reconocer que gran parte de este tiempo tenía que dedicarlo a la enseñanza del inglés, como si eso no hubieran podido aprenderlo por sí mismos, mucho más rápido y efectivamente que durante esos ¿12? ¿15 años de colegio y universidad? O como si eso fuera realmente un imperativo moral. Pero bueno, así fue; nada que hacer. Hoy lamento es no haber dispuesto de más tiempo para ayudarles o acompañarlos en lo que sí necesitaban aprender o conocer sobre la vida, sobre el sentido de sus vidas. Aunque ya lo intuía, no tuve el tiempo y lo siento mucho. Es por eso por lo que no me fluye llamar educación a este sistema de adoctrinamiento que conocemos como sistema educativo, porque no lo es. Lo que me lleva al origen de este soliloquio. Este libro de Sir Ken Robinson lo venden por ahí en los almacenes de cadena, junto con los jabones, la crema dental, los dulces. Ahí lo encuentran, se los recomiendo.



9/03/2022

LA TEORÍA DEL DECRECIMIENTO

 


La primera vez que yo leí sobre la “teoría del decrecimiento”, tan ponderada por el progresismo, estaba relacionada con mi campo de interés en cuanto a la enseñanza del inglés por allá por el 2014, porque se cuestionaba esta práctica como un ajuste de la producción del conocimiento a las demandas económico–empresariales; dicho de otro modo, enseñar y como consecuencia, aprender inglés, te convertía un activo más del sistema productivo, un bien transable y susceptible a ser convertido en objeto mercantil, o sea un peón en el capitalismo neoliberal debido a que sitúa a los bilingües en una posición de competencia y por consiguiente de desigualdad frente a quienes no lo fueran y ahí estoy citando a Gómez y Saxe (2010) y a Cook (2003) por si algún hipotético lector de estas líneas, tuviera la curiosidad intelectual de indagar más a fondo. En ese orden de ideas, esta teoría recomendaba a la población, no aprender inglés para no agudizar la desigualdad y los conflictos sociales que esta conlleva. Propone por ejemplo que el personal docente debe ser “formado” para desestimular el aprendizaje del inglés como la opción ideal para alcanzar altas metas laborales; que las metas profesionales no deben centrarse en adquirir un aumento en la capacidad de consumo y que la plenitud humana no se alcanza con tener más sino con ser más. Como mínimo, esa reflexión debería enseñar a las personas a racionalizar el gasto. No es difícil deducir que la teoría aquí se refiere a racionalizar el gasto del individuo común pero evidentemente no el gasto público. Es decir, son los individuos los que deben frenar su crecimiento y su gasto mientras que el estado lo incrementa porque al parecer, la producción excesiva y el consumo de recursos por parte de los individuos y los países, afecta el equilibrio de los recursos del país. El chiste se cuenta sólo, pero esta disonancia cognitiva no representa ninguna amenaza para el sentido de la probabilidad racional de los believers, porque sus líderes representan una raza aparte de superhumanos que actúan sin motivaciones personales y en pro del bien común. Por eso, a diferencia de las aproximaciones epistemológicas humanistas que abogan por una educación holística de individuos inteligentes, responsables en el consumo de recursos naturales, los teóricos del decrecimiento, ante la vorágine producción-consumo en el mundo occidental insta a los demás a decrecer (y esta es la frase clave: NOSOTROS NO). Que los demás países limiten sus políticas económicas, NOSOTROS NO, que los demás políticos se bajen el sueldo, NOSOTROS NO, que sus enemigos respeten los derechos de los demás, NOSOTROS NO, que sus detractores no hagan bullying, NOSOTROS NO. Que los demás se empobrezcan, NOSOTROS NO. La casta de líderes de este sistema de pensamiento, desde el más rancio comunismo, pasando por el socialismo del siglo XXI o socialismo light, y su actual progresismo reciclado, ha resultado siempre en el enriquecimiento obsceno de sus líderes y “lideresas” y el empobrecimiento de las masas, a quien curiosamente SIEMPRE enarbolan como la bandera de sus luchas. Por ahí la excepción a la regla, hasta donde yo sé, fue Pepe Mujica quien no resultó millonario.

Así que sí, yo comprendí perfectamente lo que dijo la ministra, lo que a mí me aterró no fue lo que otros creyeron era una estupidez irracional, más bien que no soslayara su cosmovisión ideológica ni las intenciones del gobierno. Quienes me han escuchado hablar saben que no hablo de este gobierno per sé, este es la continuidad de un plan de gobierno que claramente comenzó con Santos, siguió con Duque y pues continúa con Petro: saben que yo estoy convencido que son parte del mismo paquete internacional (Agenda 2030 del Foro Económico Mundial); si creen que estos ministros están aparentemente haciendo declaraciones sin sentido, aunque parezcan incompetentes, presten atención; llevan décadas preparándose para tomar el poder y lo tienen. Son perversos, no estúpidos, sólo que ahora cuentan con más apoyo popular de una masa que se nutre de noticieros y redes sociales.

Un abrazo ancestral.


8/28/2022

¿CUÁL ES TU ADICCIÓN?

 

¿A qué eres adicto? Probablemente pensaste que te estoy preguntando por qué droga sintética o natural eres adicto, pero realmente me estoy refiriendo a qué sensaciones o recompensas emocionales eres adicto. Pongámoslo en términos más profanos.

¿Qué es eso que “te sucede” con frecuencia una y otra vez de forma cíclica en tu vida que te trae algún dolor emocional y que a su vez desencadena una serie de reacciones emocionales que buscan la recompensa a la que eres adicto? Comencemos por ahí, por la recompensa; ¿Sexo? ¿(Auto)Compasión? ¿Sentido de importancia? ¿Poder? ¿Control? ¿Cuál es tu recompensa cuando a raíz de esa situación, necesitas reaccionar y tomar decisiones que terminan en ese momento último de satisfacción que inconscientemente (con mucha probabilidad) era lo que eventualmente estabas buscando? Porque enfrentémoslo, a nadie le gusta sufrir… Por nada. Pero si uno sufre por algo, si a través de ese sufrimiento logras experimentar “algo” que te trae una satisfacción, con frecuencia efímera, entonces también creerás que vale la pena. No sería muy descabellado sospechar que con frecuencia deseamos que se activen esas situaciones de dolor emocional que desencadenan la posibilidad de experimentar nuestra adicción neuroquímica; es más, no sería para nada descabellado conjeturar que somos capaces de alterar nuestra percepción sensorial con tal de asociar una situación con el componente emocional perfecto que dispare esa situación que a su vez reactivará el consabido dolor que sabes que garantizará tu inevitable reacción que a su vez culmine en tu añorada recompensa. Pues queridos, estamos describiendo aquí el ciclo de una adicción. Por supuesto que como la mayoría de Nosotros somos personas muy inteligentes, no vamos a reconocer que somos adictos, porque después de todo quién es tan estúpido como para desear ningún tipo de dolor ¿Verdad que sí?

Entonces si quieres llegar a descubrir cuál es tu adicción, sáltate la parte de las situaciones, los problemas; ya debes saber que son simplemente el vehículo que inconscientemente eliges. Me resulta absurdo creer que somos adictos a las discusiones, o la velocidad, o al sexo per se, o a las malas relaciones, o al celular, o a la comida, o a las drogas, o al dinero, o al cigarrillo, o al alcohol, o a las peleas, o a la escasez económica, al maltrato emocional o físico… No, piensa en la recompensa emocional que eso te deriva.

Ahora sí, volviendo a la pregunta inicial, y es una pregunta retórica por favor ¿Cuál es esa emoción, esa recompensa (transitoria) que realmente buscas experimentar? Porque esa es tu adicción.

Seguiremos informando.


8/24/2022

AUTOESTIMA

 


Yo creo firmemente que el 99% de la gente no comprende realmente cómo funciona la autoestima; lo relacionan con su aspecto físico, o mental, financiero o peor aún: espiritual. Tiende uno a creer que las personas guapas o inteligentes o adineradas o espirituales, que solemos admirar, son personas con una alta autoestima. Porque claro ¿Si yo fuera así de guapo, inteligente, rico o buena persona, yo tendría mi autoestima por los cielos. Pero si hicieras un estudio más juicioso y averiguaras en vez de asumir, descubrirás con horror que muchos de esos avatares modelos que admiramos, sufren de una muy baja autoestima. O dicho de otro modo: No confían en ellos mismos; porque resulta que la autoestima tiene que ver con la confianza. Me explico: Si una persona te promete algo y te incumple, tú empiezas a perder la confianza en esa persona ¿Pero qué pasa si te lo vuelve a prometer y te vuelve a fallar? Pierdes aún más confianza y dejas de creerle. Pues déjame decirte que funciona exactamente igual en la relación contigo mismo; cuando te prometes que llegando a casa te vas a poner a estudiar o a trabajar en algún proyecto y en cambio te queda viendo videos de tiktok, o te pones a ver televisión. O cuando te dices que vas a empezar la dieta (por salud o estética) pero llega un helado, una galleta que te hace caer, notarás como pierdes confianza en ti mismo, te haces pequeño, ante cada promesa fallida, tu confianza en ti mismo se hace cada vez más pequeña. Pues bien, no importa si eres guapo, inteligente, acomodado financieramente o un guía espiritual; si esto te ha pasado o te pasa, entonces tienes una baja autoestima. Un gigante que confía en sí mismo no es sino una persona que se ha ganado su propia confianza porque cuando se hace una promesa a sí mismo, la cumple. Esto pasa muy desapercibido para el común y claramente no te lo van a enseñar desde el colegio porque eso te haría un gigante y pues… Pero esto es así. Un gigante sabe que si se promete levantarse temprano (a lo que sea) se levanta, si se promete llamar a alguien lo llama, si se promete terminar algo, lo termina. Ahora, esa confianza no apareció ahí porque es un afortunado o apareció de la nada. SE LA GANÓ.

Quien padece de baja autoestima, es decir, quien no confía en su palabra, suele transitar en un círculo vicioso de buenas intenciones y decepción, culpa, entusiasmo desmedido, frustración; sabe que va a fallar desde su subconsciente pero se logra autoengañar: mañana sí me levanto a trotar, mañana sí dejo este vicio, mañana sí comienzo esa dieta… El resultado será el mismo, porque ya sus redes neuronales están conectadas, cableadas del mismo modo y es muy muy difícil, pero sobre todo requiere de un acto supremo de voluntad, salir de eso. Lo digo con conocimiento de causa, porque cuando comprendí esto que fue no hace mucho, vine a comprender los ciclos de vida que por muchos años había estado experimentando. Por supuesto conté con personas especiales que me ayudaron a salir de ese pozo sin fondo, porque es muy difícil hacerlo solo; eso lo sé. Desde entonces, a esas pocas personas que han llegado a mi vida en la misma situación, buscando ayuda, apoyo en ese proceso, les he brindado mi experiencia y conocimiento en ese tema. Sí, me conoces bien, sabes que el uso que le doy a este famoso “Zê Coaching” en las redes sociales es una parodia, me burlo de la moda del “coaching”, pero pocas personas saben que puedo ayudarles y lo he hecho dentro de las limitaciones que también tengo, pero por fortuna, el proceso es personal.

Si algún día necesitas de verdad romper esos patrones de baja autoestima, creo que en algo podré ayudarte. Mi número de cuenta es 784 662 23 34 Ahorros BCSA

Ah pa’ otras cosas sí tienes plata.

Jeje, besis.

p.d. Sólo porque conozco a mi gente, ese número no es una cuenta real…


8/17/2022

VENDER EL FIERRO PA' COMPRAR LAS BALAS

 


La obra de Rich Devos, Capitalismo Solidario, marcó en mi vida un derrotero que años después se vería reflejado en un cambio progresivo pero sustancial en mi visión de la vida referente a la economía; venía yo de una (de)formación cultural de izquierda académica propia de la universidad pública, de la que hice parte activa (te horrorizaría saber cuánto), en la que obviamente quería cambiar el mundo ahí afuera, traer la justicia social del paraíso a este planeta y más concretamente a este país. Un discurso que aunque desgastado y estéril, era muy lúdico, lleno de nueva trova cubana, Foucault, García Márquez, vino barato y obviamente mujeres impresionables y bellas. Un mundo colorido que contrastaba con mi propia economía personal, ya que mi error era tratar de entender y resolver la macroeconomía del país a través de la violencia y la enajenación cultural, sin resolver asuntos personales, sismas conceptuales subyacentes en mi mente relacionados con el dinero en mi propia economía.

Me tomó casi toda la vida y carretilladas de libros y conferencias comprender que la clave para una microeconomía sana no era la cantidad de dinero que entraba a mi cuenta bancaria sino mis gastos. En mis investigaciones me sorprendí tanto saber que personas que ganaban (ganan) 4, 5 y hasta 10 veces más que yo, estaban igual o más endeudados que yo. Porque se suele gastar lo mismo o más de lo que se ingresa. Sí yo sé que a ti no te sucede, sólo a tontos como yo.

 Tratando de comprender la macroeconomía me comí la literatura de la escuela austríaca, desde Carl Menger, pasando por Ludwig von Mises y terminando en Jesús Huerta de Soto, pudiendo contrastarla con las políticas de gasto público de Keynes en su “Teoría general del empleo, el interés y el dinero” aplicables sólo al crack de la bolsa de 1929; llegué a la conclusión de que sólo se puede tener una microeconomía sana si tienes una mentalidad austera con el dinero: Si tus egresos son inferiores a tus ingresos. Me llama la atención de los Keynesianistas y fanáticos del gasto público excesivo (hoy en día llamados “Progresistas”) que al mismo tiempo que condenan el consumismo, aplauden el endeudamiento sistemático para salir de la pobreza. Dicho de otro modo es como vender una pistola para comprarse balas. 

En Colombia venimos de un gasto público por PIB del 26,28% en el año 2.000 al 33,56% en el 2020. Y mira este dato, los años donde más se invirtió significativamente en lo que acá llaman “educación” (ni me hagan referirme a esto), fue en 1984 y 1989. En salud: entre los años 1996 a 1999. Estoy hablando de cifras no mayores al 22% de ese gasto.  ¿Y el resto? Me gustaría que pensaras en esos gastos fijos que hacemos (porque somos nosotros los que engordamos las arcas del estado, es nuestro dinero, el que te gravan por comprar productos, por hacer compras, etc.

En fin. Podemos hacer tres reformas tributarias seguidas; suponiendo que ese dinero sea utilizado en su totalidad por esos seres angelicales que desde hace poco nos gobiernan, para la redistribución de la riqueza, incluso suponiendo que así fuera, de todos modos tenemos un problema fundamental:

Estamos creando un hueco fiscal que consiste en tener una economía con más gastos que ingresos. Porque estos programas no generan ingresos sino egresos. Por lo que seguiremos necesitando siempre más dinero y más dinero. Vendemos el fierro pa’ comprar las balas.

En vez de enfocarnos en depurar el Estado y purgarlo de la corruptela, se podría con el mismo recaudo actual, cubrir con creces el gasto público real que garantice los derechos fundamentales de los ciudadanos de Colombia. Pero como esa no es la intención, seguiremos adelante con la destrucción de nuestra macroeconomía.   

P.D. Antes de embarcarte en una embarazosa discusión sobre partidos de derecha y de izquierda conmigo, te recomendaría una actualización académica que ponga fin a la estupidez de creer que el mundo está dividido entre negros y blancos, izquierdas y derechas, hombres y mujeres, homosexuales y heterosexuales, pobres y ricos, capitalismo y socialismo, etc. Te puedo recomendar literatura pertinente y una dieta baja en noticieros.


8/15/2022

LA ÚNICA CERTEZA ES LA INCERTIDUMBRE

 


Quiero reiterar mi agradecimiento a los 2 o 3 lectores recurrentes de mi blog, por tomarse el tiempo de leer mis ocurrencias, sea por aburrimiento o curiosidad, les agradezco.

Este tema sé que lo conocen de sobra, hace parte de nuestro día a día y sin embargo parecemos ignorar los principios fundamentales que rigen este sistema que solemos llamar Vida; un fascinante videojuego que a pesar de todo no aprendemos a jugar a nuestro favor.

Si eres tan curioso como yo, seguramente has investigado el principio de incertidumbre de Heisenberg. (¿Quién no?). Pero no voy a enfocarme en una explicación matemática de cómo funciona, ni siquiera de una explicación cualitativa de ese principio de la física. Vamos a irnos a la parte más lúdica, profana:

A estas alturas, tengas la edad que tengas, habrás notado que la vida ha resultado ser impredecible desde sus segmentos más pequeños del minuto a minuto, hasta los que abarcan la historia de este planeta. Nadie ha sido capaz realmente de predecir el futuro basado en el estudio minucioso de los acontecimientos del pasado. Ni Nostradamus ni ningún profeta, ni los adivinadores de la suerte, ni los mercenarios de las malas noticias (los noticieros), ni los especuladores de Wall Street ¡Nadie! Y esto tiene una sencilla y única razón: El principio de incertidumbre o indeterminación de Heisenberg. El cual afirma que no se puede determinar simultáneamente y con precisión arbitraria, ciertos pares de variables físicas como son por ejemplo, la posición y el momento lineal de un objeto dado. Incluso, se afirma que si un viajero del futuro viene hoy, 15 de agosto del 2022 a decirnos lo que va a suceder mañana, este software que es la Vida aplicará unos algoritmos predefinidos, alterando la secuencia de operaciones a realizar de manera que resuelve ese problema de predictibilidad, para que siga siendo un juego interesante.

Dicho de otro modo: Nadie en este planeta tiene las respuestas de nada. Nos enseñaron que sí, que los médicos, los científicos, los gurúes, los expertos, los estudiosos, los místicos, los profetas, los políticos, etc.… Y a ellos acudimos y en ellos solemos colocar la esperanza de un futuro o un resultado predecible, estable, seguro. Pero lamento decirte que esto no es posible. Si acertaran en un evento, el algoritmo matemático variará de persona a persona, de familia a familia, de cultura a cultura, hasta el infinito.

Voy a darte un ejemplo: Una medicina, una dieta, un pronóstico de cualquier tipo, podrá acertar probablemente en un muy, muy bajo promedio de individuos y por un período insostenible de tiempo. Pero aquí estamos, confiados ciegamente en que si determinada medicina, por decir algo le sirvió a un grupo experimental de personas, va a tener el mismo resultado exponencial de la muestra.

Ahora aplícalo a las soluciones que nuestros expertos, gurúes, científicos, maestros, asesores financieros, nos han dicho que se comportará el futuro si hacemos lo que ellos nos dicen, y que nosotros elegimos (Nadie nos obliga), que elegimos creer como ciertos: El resultado es efectivamente: El mundo caótico en que vivimos. Es decir, hemos decidido creer en la certidumbre que nos brindan las predicciones de los expertos, a pesar de cada experiencia individual varía tan infinitesimalmente como es posible, de individuo a individuo en un mundo que abiertamente nos ha demostrado que esto no es posible.

En conclusión, al menos para mí cuya inteligencia y conocimientos son obviamente irrelevantes frente a nuestros expertos, el origen de nuestra infelicidad consiste en no aceptar el hecho de que no se puede determinar simultáneamente y con precisión arbitraria, ciertos pares de variables físicas como son por ejemplo, la posición y el momento lineal de un objeto dado.


8/02/2022

PONER LAS MANOS EN EL FUEGO

 


Cuéntame ¿Por quién eres capaz de "poner las manos en el fuego"? ¿Quién es esa persona, ese ser superior por el que eres capaz de exponer tu integridad física literalmente? ¿Quien es digno de tu absoluta adhesión y creencia ciega? 

Hacia la edad media en europa, cuentan las Ordalías, se precisaba poner las manos en el fuego para demostrar la inocencia o culpabilidad de alguien frente al buen Dios. Para hacerte corto un cuento largo, se dice que ahí se originó el término "poner las manos en el fuego", sin embargo y a pesar de haberlo leído en textos históricos, no puedo "poner mis manos al fuego" para dar fe de mi parte de que eso fue así, lo siento; pero digamos que fue cierto, te pregunto entonces:

¿Cuál es esa persona, ideología, sistema político, económico, creencia, etc, por la que eres capaz de poner tus manitas en el fuego?

Yo estoy convencido de que "la gente" no es estúpida o bruta.. (antes sí pero uno madura). No, simplemente "la gente" actúa según su experiencia personal y conocimiento sobre las cosas, le dicta. Y ahí es donde entra mi duda metódica:

¡Conocimiento! Se define como "La acción y efecto de conocer, es decir, de adquirir información valiosa para comprender la realidad por medio de la razón, el entendimiento y la inteligencia". ¿Pero te has preguntado de dónde viene esa información? ¿Qué es lo que conoces por lo que eres capaz de poner tus manos en el fuego? Y lo digo por mí, yo no soy capaz de poner mis manos en el fuego por ABSOLUTAMENTE NADA NI NADIE. No que eso está en la biblia, que eso lo dijo fulano, que eso lo vi en el noticiero, que eso es viral en redes sociales... ¿Ah sí? ¿Así que podemos ir ante un tribunal imaginario (digamos cuyo Juez sea el mismísmo Jesucristo para que haya confianza en el prcedimiento y no resulte ser unas JEP o no termine todo en un informe final de la oficina de la Omisión de la Verdad), y exponer tus manos al fuego en caso de que no se llegara a pruebas concluyentes que sostengan CATEGÓRICAMENTE de que tus postulados sobre fulano o sutano, creencia, bla, bla... y por las que estás arriesgando tus manitas, sea cierto? Pues conmigo no cuenten. Sí señoras y señores, llámenme Pirrón de Elis, soy un Escéptico por natura. No creo ni en lo que veo ni en lo que leo. Me gusta el ejercicio de sobrevolar conceptos, teorías pero no me caso con ninguna. Valoro mis manos y me parece una necedad discutir por las adhesiones totalitarias de quienes están seguros de todo. Y tú dirás "Ah pero será ahora.." Pues fíjate que ese tema que compuse hace muchísimos años (joder, parecen siglos) cuando me creía dizque cantante, con mi amigo Mares, ya daban cuenta de mi esceptisismo elemental que duda de que la criatura humana dispone de la capacidad suficiente para encontrar verdades. Te lo dejo ahí para que lo escuches si la curiosidad te da para tanto.

Pero quiero dejar abierto el hilo, ¿Hay algo o alguien por la que seas capaz de exponer tus manos al fuego? A mí sí me da curiosidad por conocerlo. Si tal vez no te atreves a dejarlo aquí en los comentarios, déjamelo saber por interno.








7/23/2022

EL CORAZÓN DEL HOMBRE

 


Me pidieron que ahondara sobre un tema sobre la publicación anterior de mi blog y que sé que sólo toqué de forma tangencial. Voy a intentarlo pero siempre recuerden que estoy hablando de mi propia interpretación, percepción y estudios. Nada de lo que yo escriba o afirma tiene que ser cierto. Sólo me apoyo en los postulados científicos que he leído y bien sabemos que estos pueden variar sustancialmente con el tiempo.

Tiene que ver con ese hábito que yo llamé "Monólogo entre dos personas (o más)", ese afán infantil de hablar de sí mismo cuando otros hablan de sí mismos, enfrascándose en una competencia de información, con frecuencia desbordante e innecesaria. Cuando el individuo es ligeramente más listillo y desea subliminar su desesperada búsqueda de aceptación, admiración, respeto, envidia o lo que sea que necesite generar durante esas interacciones sociales, hace una pregunta a la otra persona, pero buscará ingeniosamente la forma de retomar el tema que le interesa: Él/Ella misma.

Este narcisismo individual y social, lo describe perfectamente Erich Fromm en su libro "El corazón del hombre", porque lo desliga sabiamente del narcisismo freudiano restringido al niño pequeño y al paciente psicótico. Voy a resumirlo con un chiste que el mismo Erich narra en su libro:

"Un escritor se encuentra con un amigo y durante mucho tiempo le habla de sí mismo. Después dice: "Hablé de mí hasta ahora. Hablemos ahora de ti. ¿Te gustó mi último libro?"

Seguramente me dirás "Ah pero yo no soy narcisista, no me considero bonito o bonita y no he desarrollado ningún apego a mi persona". Ok, el hecho de que no te hayas identificado con tu cuerpo no significa que no lo seas (todos los somos), pero prefiero citar textualmente a Fromm aquí: "El individuo narcisista no toma necesariamente toda su persona como objeto de su narcisismo. Frecuentemente enfoca su narcisismo sobre un aspecto parcial de su personalidad; por ejemplo, su honor, su inteligencia, sus proezas físicas, su ingenio, su buen aspecto (en ocasiones constreñido a detalles como el pelo o la nariz). A veces su narcisismo se refiere a cualidades de que normalmente no se enorgullecería una persona, como su capacidad para sentir miedo y, en consecuencia, para prever el peligro. "Él" se identifica con un aspecto parcial de sí mismo. Si preguntamos quién es "él", la respuesta adecuada sería que "él" es su cerebro, su fama, su riqueza, su pene, su conciencia, y así sucesivamente. Todos los ídolos de las diferentes religiones representan otros tantos aspectos parciales del hombre. En el individuo narcisista, el objeto de su narcisismo es cualquiera de las cualidades parciales que para él constituyen su yo. El individuo cuyo yo está representado por su propiedad puede recibir bien una amenaza a su dignidad, una amenaza a sus pertenencias es como una amenaza a su vida."

A veces su objeto de narcisismo no es él mismo sino otras personas, sus hijos, sus parejas, sus amigos, sus líderes políticos y religiosos a quienes percibe como una extensión holográfica de sí mismo. "No es porque sea mi hijo pero..."

Así las cosas, no está mal reconocer que estamos enfermos, nuestra narcosis moral explica por qué un dictador o un asesino es malo sí y sólo si no forma parte de nuestra cosmovisión social, ética, moral; porque cuando converge con ella, mágicamente encontramos explicaciones racionales para justificar cualquier barbaridad.

Espero haber cubierto en parte tus expectativas. 

p.d. Si alguna o algún feminista tiene algún reclamo que hacerme por el título o el lenguaje poco "inclusivo" que uso o por el título del libro, podemos charlarlo en público o en privado.

7/21/2022

LA LOCA DE LA CASA

 


A veces por diversión, me pongo a observar el comportamiento de las personas que veo por ahí, cuando están solas en la calle, en sus vehículos, en una oficina… A no ser que estén participando de lo que yo llamo un monólogo entre dos o más, donde cada participante sólo está esperando que el otro se calle para poder decir lo que piensa o relacionar lo que el otro está diciendo, consigo mismo… Algo más o menos así:

-      Imagínate que mi hijo me regaló un reloj

-     - Ah el mío me regaló un vestido.

-      -La mayor ya entró a la universidad

-      -La mía ya se graduó, gracias a Dios.

-      -Tengo una amiga que trabaja en la registraduría.

-      -Y yo tengo una que trabaja en la procuraduría…

Presta atención la próxima vez y verás que cada quien vive en la burbujita de su mente y eso es todo. Es como una competencia para determinar quién está más arriba en la escala moral, social, económica, intelectual… Pero cuando no están en esta competencia ridícula, casi sin excepción lo que percibo es esa mirada vacía de alguien que tiene su mente en otro lugar, en otras personas, en otras preocupaciones; yo le llamo: La inteligente mirada de la vaca, la gente común le llama “ser adultos”; Mientras su cuerpo desprotegido hace mecánicamente lo que fue programado para hacer, comer, caminar, cagar, conducir… Casi puedo escuchar el ruido de las palabras, los murmullos ininteligibles que sobrevuelan la cabeza del individuo común como un enjambre de moscas. Un ruido ensordecedor de pensamientos inconexos y desordenados que adormece el espíritu descuidando el cuerpo, exponiéndonos a los peligros ahí afuera de un mundo cuyas leyes físicas están inexorablemente sujetadas nada más y nada menos que a la entropía. Si esto no fuera suficientemente alarmante, nos sometemos a vivir en un espacio atemporal, porque te prometo que el 99% de esos pensamientos que invaden nuestra cabeza, pertenecen al pasado o al futuro, no al presente, con las consecuencias que eso implica. El presente le molesta porque ahí vive La Chispa que realmente somos, el presente es el regalo de la vida. Varias veces me han leído decir que la mente puede ser nuestro peor enemigo, especialmente si no sabes cómo funciona, si desconoces cómo trabaja tu subconsciente. Si algún día siento que quiero hablar de este tema en un Live con quien sea que esté por ahí para escucharme, lo haré. Tengo cientos de horas de lectura, investigación, experiencias y me gustaría compartir y conocer la experiencia de otros al respecto.

El punto es que nuestra mente viene a ser ese perro malcriado, imprudente pero potente que vive jalando a su amo con la cuerda para donde le de la gana sin control; un hábito peligrosísimo si me permites expresarlo porque cuando no tenemos control sobre nuestra mente, no tenemos control sobre nuestra vida. Si un perro nos lleva para donde él quiere, no vamos a poder responsabilizarlo de las consecuencias de ello, fue nuestra decisión dejarnos arrastrar por este animalito. Pero es exactamente lo que suele suceder, nuestra mente nos lleva para donde le dé la gana sin que nosotros hagamos algo para detenerla o controlarla. La consecuencia de ello, la llamamos buena o mala suerte o los más introspectivos: La voluntad de Dios. Si no me crees, pásate por un hospital, una cárcel, la morgue... Son la evidencia máxima del cisma vital entre cuerpo, mente y espíritu.

Y eso que no mencioné a los celulares, las redes sociales, los nuevos huesos que persiguen ansiosamente nuestros perros.


7/10/2022

INTELIGENCIA

Suele confundirse la inteligencia con el conocimiento (sobre alguna cosa), por eso a veces creemos que alguien es inteligente porque lee mucho, por ejemplo; porque ha estudiado maestrías y doctorados. Y entre más se estudia, en una sociedad como la nuestra más inteligente nos parece una persona. ¿De dónde surgió esta interpretación de la inteligencia? Ni idea, pero personalmente discrepo radicalmente de esto. Ni siquiera me voy a referir a la interpretación endógena que Gardner hace sobre las inteligencias múltiples sino que me voy a basar en la prosaica definición general de la biología: La capacidad o facultad de entender, razonar, saber, aprender y de resolver problemas. Esto es más fácil de interpretar a la hora de asignar grados de inteligencia.

Un estudio de Erhan Genç afirma que los cerebros inteligentes se caracterizan por una red neuronal delgada pero altamente eficiente. Esto ayuda a lograr un alto nivel de pensamiento mientras se minimiza la actividad neuronal; pero sigue siendo siempre un análisis sobre la capacidad potencial de la mente humana y sí, esto es muy importante. Estamos “cableados” con mayor o menor ventaja en comparación con los demás pero para mí, eso no te hace necesariamente más inteligente. Voy a explicar mi teoría con un ejemplo.

Yo conduzco un Mercedes Benz y tú un viejo Renault Clio, digamos en muy buenas condiciones ambos. Evidentemente el potencial, la calidad, el rendimiento de mi carro es superior al tuyo ¿Pero de qué sirve todo ese potencial si el propósito de ambos es conducirnos del trabajo a la casa, por ejemplo? Además como yo soy conocedor de lo que tengo, tiendo a sobreestimar mis capacidades de conductor y con frecuencia tomo decisiones temerarias que podría eventualmente conducirme a un accidente; mientras tú, consciente de lo que manejas, eres precavido, sensato y la verdad no necesitas demostrarle nada a nadie; el único propósito de tu carro es transportarte y eso lo cumple a la perfección.

Extrapolemos esto a la inteligencia: Yo (mi Mercedes) soy “más inteligente” por mis capacidades, mis estudios, que tú (tu Clio). Pero si no me equivoco, el más profundo y enraizado en nuestro corazón, es el deseo de “ser feliz”. Supuestamente todo lo que hacemos en la vida, los sacrificios, nuestras decisiones más trascendentales, todo lo hacemos para “ser felices” ¿O me equivoco? Pero mi “mayor inteligencia” no significa ninguna ventaja frente a la tuya si ambos logramos ser felices.

Mi conclusión es que ser más inteligente (en el sentido de tener mejor carro), no te garantiza ser más feliz; Pienso en Forrest Gump, que vendría a ser como un reanault 4, logra muchos más momentos de felicidad que muchos de los que se ríen de él; porque para mí la felicidad no es el resultado de una mayor capacidad de entender, razonar o resolver problemas. La clave no está en el carro sino en su conductor, la pregunta es ¿Quién conduce tu carro? ¿Cómo lo conduce? ¿Cuál es tu lugar de destino? Podría hacer la misma analogía con computadores, con celulares… No importa cuál es tu capacidad intelectual, importa que tengas claro cuál es tu destino y de acuerdo a ello, tomar las decisiones que necesites tomar para llegar a tu destino (ser feliz). Porque después de todo ¿No es nuestra experiencia humana un búsqueda consistente e incansable de breves momentos felices?

Resumiendo, para mí las personas más inteligentes son aquellas que saben tomar las mejores decisiones que les acerquen a sus propósitos de vida; Y seguramente debo estar equivocado porque eso no es lo que nos enseñan desde niños ni en la escuela ni en el seno familiar, ni en ninguna parte… Pero es mi teoría. 

7/05/2022

HALITOSIS VERDADERA

 


La halitosis es un término que sirve para definir un trastorno funcional que consiste en el aliento desagradable y que la ciencia se lo atribuye a factores fisiológicos o patológicos y es de esas condiciones que no sólo la sufren quienes la padecen sino mayormente quienes rodean a los que la padecen.

Dentro de su tipificación, me llama la atención una que los médicos llaman Halitosis verdadera y cito textualmente: “La halitosis verdadera está determinada por la presencia de un aliento desagradable, cuya intensidad sobrepasa los límites socialmente aceptables, por lo tanto resulta perceptible para los demás. Se subclasifica en halitosis fisiológica y halitosis patológica”.

Por otro lado tenemos a estas personas que sufren de una condición llamada Hipersensibilidad olfativa; creo que ya vas sospechando hacia dónde voy…

Yo soy uno de ellos, pero lamentablemente mi hipersensibilidad olfativa no se refiere a la halitosis fisiológica/patológica sino a aquella que sufren algunas personas que cada vez que abren el hocico es para hablar mal de alguien, criticar al prójimo, al familiar, al extraño y hasta a su madre. Esta es la que yo llamaría “halitosis verdadera”; este aliento extremadamente desagradable que emanan estas personas sobrepasa los límites socialmente aceptables y a mi entender clasifica como halitosis patológica; siempre tienen algo que decir, algo que opinar (malo) sobre cualquier persona, situación, gobierno, proceso, o lo que caiga en sus apestosas fauces. Suele pasarnos a nosotros los de hipersensibilidad olfativa que cuando aprendemos a reconocerlos, nos levantamos horrorizados y nos vamos; percibimos su mal aliento, su mala vibra aunque no hayamos hecho contacto visual aún, lo sabemos (a veces cuando ya es demasiado tarde y ya ha abierto su bocaza y dado rienda suelta a su incontinencia textual). Contrario a la halitosis convencional, estas criaturas desconocen que la sufren, se perciben a sí mismos como personas muy inteligentes y bien informadas; sienten esta necesidad de esparcir sus opiniones y disertaciones micobacterianas y que sería una lástima que su infortunado auditorio se perdiera de sus profundas reflexiones y opiniones. ¿Conoces a alguien así? ¿Alguien que abre la jeta sólo y exclusivamente para vomitar y volcar sobre los demás su miseria interior? Los vas a reconocer porque habla mal hasta de su propia familia, de sus amigos, de gente que incluso le ha extendido su confianza.

Por si las moscas te invito a hacerte un test infalible cada mañana, no vaya a ser que padeces de halitosis verdadera y no lo sepas. Es importante que te sitúes ante un espejo, te acerques y extiendas tu aliento y te preguntes: ¿Estoy abriendo mi boca durante el día para bendecir (hablar bien de los demás y de ti mismo/a) o vivo esparciendo mis opiniones (críticas por supuesto porque soy un pensador contestatario y avispado) la mayor parte del día?

Al menos así lo hago yo para mantener a raya esta lamentable enfermedad. Funciona.

Disclaimer:  Nada de lo que escriba en este blog o en mi perfil, debe ser tomado en serio ni con ello le estoy diciendo a nadie cómo debe vivir. Leer bajo su propia responsabilidad.