8/24/2022

AUTOESTIMA

 


Yo creo firmemente que el 99% de la gente no comprende realmente cómo funciona la autoestima; lo relacionan con su aspecto físico, o mental, financiero o peor aún: espiritual. Tiende uno a creer que las personas guapas o inteligentes o adineradas o espirituales, que solemos admirar, son personas con una alta autoestima. Porque claro ¿Si yo fuera así de guapo, inteligente, rico o buena persona, yo tendría mi autoestima por los cielos. Pero si hicieras un estudio más juicioso y averiguaras en vez de asumir, descubrirás con horror que muchos de esos avatares modelos que admiramos, sufren de una muy baja autoestima. O dicho de otro modo: No confían en ellos mismos; porque resulta que la autoestima tiene que ver con la confianza. Me explico: Si una persona te promete algo y te incumple, tú empiezas a perder la confianza en esa persona ¿Pero qué pasa si te lo vuelve a prometer y te vuelve a fallar? Pierdes aún más confianza y dejas de creerle. Pues déjame decirte que funciona exactamente igual en la relación contigo mismo; cuando te prometes que llegando a casa te vas a poner a estudiar o a trabajar en algún proyecto y en cambio te queda viendo videos de tiktok, o te pones a ver televisión. O cuando te dices que vas a empezar la dieta (por salud o estética) pero llega un helado, una galleta que te hace caer, notarás como pierdes confianza en ti mismo, te haces pequeño, ante cada promesa fallida, tu confianza en ti mismo se hace cada vez más pequeña. Pues bien, no importa si eres guapo, inteligente, acomodado financieramente o un guía espiritual; si esto te ha pasado o te pasa, entonces tienes una baja autoestima. Un gigante que confía en sí mismo no es sino una persona que se ha ganado su propia confianza porque cuando se hace una promesa a sí mismo, la cumple. Esto pasa muy desapercibido para el común y claramente no te lo van a enseñar desde el colegio porque eso te haría un gigante y pues… Pero esto es así. Un gigante sabe que si se promete levantarse temprano (a lo que sea) se levanta, si se promete llamar a alguien lo llama, si se promete terminar algo, lo termina. Ahora, esa confianza no apareció ahí porque es un afortunado o apareció de la nada. SE LA GANÓ.

Quien padece de baja autoestima, es decir, quien no confía en su palabra, suele transitar en un círculo vicioso de buenas intenciones y decepción, culpa, entusiasmo desmedido, frustración; sabe que va a fallar desde su subconsciente pero se logra autoengañar: mañana sí me levanto a trotar, mañana sí dejo este vicio, mañana sí comienzo esa dieta… El resultado será el mismo, porque ya sus redes neuronales están conectadas, cableadas del mismo modo y es muy muy difícil, pero sobre todo requiere de un acto supremo de voluntad, salir de eso. Lo digo con conocimiento de causa, porque cuando comprendí esto que fue no hace mucho, vine a comprender los ciclos de vida que por muchos años había estado experimentando. Por supuesto conté con personas especiales que me ayudaron a salir de ese pozo sin fondo, porque es muy difícil hacerlo solo; eso lo sé. Desde entonces, a esas pocas personas que han llegado a mi vida en la misma situación, buscando ayuda, apoyo en ese proceso, les he brindado mi experiencia y conocimiento en ese tema. Sí, me conoces bien, sabes que el uso que le doy a este famoso “Zê Coaching” en las redes sociales es una parodia, me burlo de la moda del “coaching”, pero pocas personas saben que puedo ayudarles y lo he hecho dentro de las limitaciones que también tengo, pero por fortuna, el proceso es personal.

Si algún día necesitas de verdad romper esos patrones de baja autoestima, creo que en algo podré ayudarte. Mi número de cuenta es 784 662 23 34 Ahorros BCSA

Ah pa’ otras cosas sí tienes plata.

Jeje, besis.

p.d. Sólo porque conozco a mi gente, ese número no es una cuenta real…