ENSAYO: No voten por mí

Si alguna vez me gana la locura y decido lanzarme a la presidencia de la república, les pido desde ahora que no voten por mí. El plan subyacente es la creación de una dictadura jamás vista. Comenzaré por la Justicia, por ejemplo cambiaré algunas leyes que nos permitan amputarle las manos a los ladrones, la castración para los que incurran en delitos sexuales. Los homicidas según su tipología afrontarán la ejecución inmediata. El hurto al estado de cualquier forma (no existirán hurtos grandes o pequeños ni tecnicismos del derecho penal) será castigado con el hacinamiento en selvas y serranías más salvajes del territorio nacional al que le robaron. En serio, no voten por mí; Los criminales sufrirán antes de cumplir su sentencia, exactamente el mismo castigo que infligieron a sus víctimas. Es mi dictadura y voy a hacer lo que se me de la gana, si no les gusta creen su propia dictaura. La docencia por ejemplo será la carrera más difícil de culminar, sólo después de todo tipo de pruebas psicológicas y vocacionales y no será la opción del que fracasó en su intento por estudiar otras carreras. Así mismo será la profesión mejor pagada del pais. Los políticos no tendrán salario, ellos serán lo que deben ser: un servicio que el voluntario llevará a cabo en su tiempo libre (después de todo los actuales servidores públicos ya hacen un amplio uso de éste), Ellos deberán servir a su ciudadanos y no al revés. Sus logros serán reconocidos públicamente y con algunos incentivos económicos. Bueno, tengo tantos asuntos en mi agenda que no podría mencionarlos todos ahora pero de verdad les pido, no voten por mí. No seré yo mismo... Quedan advertidos.